Si estáis cansados de los típicos cuadros o vinilos para decorar la pared, ahora hay cosas nuevas y totalmente sorprendentes. Los Wallflower son cuadros hechos de plantas. Sí, lo has oído bien. Se trata de una idea llevada a cabo por dos profesores de horticultura, David Cussol y Paul Mihau, que decidieron simplificar la técnica del cultivo vertical que tan popular se está haciendo.
El cultivo vertical o los muros vegetales son una moda en alza, ya que permiten tener muchas plantas ocupando muy poco espacio. Si tienes un piso pequeño, un balcón u otro lugar al que le quieras dar vida, es la mejor opción. Pero para personas que no son expertas en el cuidado de plantas puede resultar difícil. Por eso se han creado los cuadros de plantas, llamados Wallflower.
Son piezas muy divertidas, que aportan frescura y naturalidad a cualquier espacio. Además, han pensado en todo, utilizando plantas que requieran poco mantenimiento. Es un detalle ideal para una cocina, un salón o incluso para la habitación, aporta oxígeno y mejora la relajación de toda la familia. Añadir plantas a tu hogar siempre es una buena idea, y si es de la manera más original, todavía mejor.
Estos cuadros vienen por ahora en seis formatos diferentes. Como quieren aportar algo natural, todo el material del cuadro es 100% reciclado. Hay diversos tamaños y colores, para que escojas el más adecuado a tu decoración. Además, cuentan con un sencillo depósito de agua que se puede controlar fácilmente, para que no nos preocupemos de regarlas constantemente. Sin duda se trata de una idea estupenda para añadir plantas al hogar.
El artículo Wallflower, sorprendentes cuadros de plantas ha sido originalmente publicado en Decoora.