Los tonos pastel son muy acertados para decorar el hogar, ya que al ser tan suaves nos ayudan a crear una atmósfera relajante y hogareña. Entre ellos hay mezclas que siempre resultan un acierto, como el coral y gris, dos tonos que hemos visto en muchas decoraciones y espacios.
Nos encanta este conjunto de tonos, porque el gris es un tono neutro y sereno, uno de esos colores que siempre funcionan en todos los ambientes, y el color coral le aporta alegría y vivacidad, por lo que se complementan a la perfección. Descubre cómo integrarlos en diferentes ambientes.
Todo hay que decirlo, el tono coral es un tono entre rosado y anaranjado, que se asocia a lo femenino y también al verano, por lo que es ideal para darle un toque chic al dormitorio. Desde luego es perfecto para dormitorios de niñas o femeninos, con bonitos textiles y detalles cool.
Este también es un color ideal para el baño, ya que el gris quita peso al alegre tono coral. Es un color que nos recuerda a los lugares exóticos, por lo que también se complementa perfectamente con la madera y con plantas en tonos verdes muy sencillos. Si usamos este tono tan fuerte es mejor no añadir muchos otros en los textiles, limitándonos a utilizar toallas en tonos blancos.
Si quieres decorar tu oficina, puedes utilizar un mueble de este color. Ese rincón de trabajo con el papel pintado en gris, fondo blanco y una alfombra de yute muy natural tiene un toque muy chic. Lo mismo pasa con el rincón de lectura en el salón. El color coral siempre tiene la cualidad de darle alegría a cualquier espacio, pero no debemos utilizar demasiado para no saturar. ¿Qué os han parecido estas ideas con tonos grises y coral mezclados en el hogar?
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